La revolución nos ha decepcionado.
Pero no nos quedaremos contemplando.
El cine es urgente. Y nunca debió dejar de serlo.
“Revista Séptimo Arte” es una publicación generacional. De una generación que creció encerrada viendo televisión mientras que fuera de casa corrían las balas, los apagones y el miedo. De una generación que ni siquiera tuvo el poder de decidir si este cruel sistema basado en el capital era el que queríamos. De una generación que, por lo mismo, no reclama nada por que sabe que es batalla perdida. De una generación que sabe que el estado y el sistema termina por absorber, que los pobres siguen igual de pobres pero que los ricos ahora son diez veces mas ricos que hace treinta años atrás. De una generación que ve como la vieja izquierda chilena se lamenta de “perder”, pero que a fin de cuentas sigue ocupando oficinas públicas y privadas desde donde gobernaban como un empresario derechista mas.
Nuestra generación no ganó ninguna revolución, sino que nació con la pérdida de la esperanza por un futuro distinto y justo. Nuestra generación asume que hay que tener celulares, notebooks, cargos, autos, viajes, tarjetas, happy hours, fotos con famosos etiquetadas en Facebook. Nuestra generación, a fin de cuentas, es la de la imagen. Y paradójicamente es sobre lo que menos se escribe y reflexiona.
¿Cuál es el sentido de hacer una nueva publicación de cine?
Hacer todo lo contrario a lo que se está haciendo ahora.
En vez de seguir escribiendo de los estrenos comerciales, escribiremos de nuestra molestia por que las cadenas de cine norteamericana se han comido las ventanas para exhibir cine nacional. En vez de hacer concursos, hablaremos con los cineastas. En vez de hacer críticas de cine, hablaremos en primera persona sobre el cine que consideramos valioso y que no tiene cabida en las salas de explotación.
“Séptimo Arte” no es una revista nueva. Hemos decidido tomar el nombre de la antigua revista del Cine Club Universitario en los años cincuenta. Fundada por Pedro Chaskel, es con él que abrimos esta nueva etapa por medio de un dialogo extenso y generoso que describe una parte aguerrida y valiente del cine nacional. Esta “refundación”, si es que se nos permite esta osadía de concepto, es el guiño hacia donde apuntamos. Seguiremos haciendo las cosas que consideramos que son necesarias, seguiremos redescubriendo la historia del cine nacional, hablaremos desde la crítica, el análisis, pero siempre en idioma español. No nos interesa ser una publicación de una elite, por que propugnamos recuperar un cine popular pero a la vez formacional, conceptual y discursivo.
Esta publicación entiende el cine no como un elemento de entretención o un hobby de fin de semana, sino como una herramienta que va de la mano con lo que nos rodea, con el cotidiano, con lo justo y lo injusto del dia a dia. El cine es un arte, no un negocio.
Lanzamos esta edición digital de una revista que nació exactamente hace cincuenta y seis años, y esperamos ser fieles a ese espíritu analítico, cuestionador, inquieto y poco pretencioso que desarrolló un grupo de jóvenes que sin presupuesto, sin poder económico, lograron hacer las cosas necesarias.
“Es propio del privilegio y de toda posición privilegiada matar el espíritu y el corazón de los hombres” se decía por ahí. Nosotros tenemos el inconformismo que permita la necesaria acción de crear
Como no estamos conformes, hemos decidido ir mas allá y publicar el cuarto número de la revista “Séptimo Arte”, la publicación del Cine Club Universitario que naciera en los años cincuenta. Esta vez en digital, por que es mas barato y la puede leer mas gente. No pretendemos mayor cosa que hacer algo que nos parece necesario. Y si estamos equivocados, realmente nos tiene sin cuidado.
– El Editor